Grabar tus sueños y reproducirlos después, podría ser una realidad

¿Cuantas veces no intentamos recordar nuestros sueños? Ya sea por lo increíbles que son, porque buscamos proporcionarle un significado o hay quienes buscan darles una interpretación. Podríamos tener la posibilidad de grabarlos y reproducirlos posteriormente gracias la tecnología onírica.

Durante años se ha tratado de descifrar los sueños, aplicando métodos diversos como los estados de trance o métodos cognitivos del psicoanálisis y la neurociencia.

Científicos japoneses han desarrollado un artefacto capaz de reconstruir nuestros sueños y la propuesta resulta tentadora. Recientemente, la revista Science publicó un estudio en el que este grupo ha demostrado que grabar los sueños para reproducirlos en otro momento es científicamente posible.

Este instrumento para “leer sueños” está basada en el conocimiento concreto de que cuando visualizamos ciertos objetos, nuestro cerebro crea patrones neuronales (así genera representaciones, mismas que a su vez conforman nuestra realidad, según el psiquiatra Allan Hobson). A partir de ello, los científicos pensaron que un algoritmo podía ser usado para enlazar esos datos a un escáner, el cual sería capaz de generar las imágenes del sueño.

Actualmente ya se han hecho varios experimentos donde el mecanismo permite generar imágenes del sueño de un individuo por resonancia magnética, aunque rudimentariamente; el comportamiento de la mente se analiza mediante un electroencefalograma, el cual es utilizado para saber cuando los sujetos entran en la fase de sueño. Luego se les despierta abruptamente, para que narren aquello que soñaban.

Después se utilizan las grabaciones de la resonancia magnética para ver qué tanto coinciden las narraciones con las imágenes que, emulando los patrones neuronales, logran reconstruir mediante imágenes obtenidas de Internet, y finalmente se obtiene un video sobre el posible sueño del sujeto.

Hasta ahora, los investigadores sólo han conseguido reproducir el sueño de manera correcta en un 60% de las ocasiones; sin embargo, esto no deja de ser un hallazgo valioso que, en un futuro, podría valerse de herramientas como la realidad virtual para obtener una imagen más acertada del sueño “vivido”.